Las recientes elecciones en el Colegio de Abogados y Notarios de Guatemala (CANG) marcaron un hito en la historia de la institución, al colocar por primera vez a dos mujeres al frente de sus principales instancias directivas.
La votación, que registró una participación récord, dio como resultado una configuración inusual en la distribución del poder dentro del gremio, lo que podría modificar el equilibrio de fuerzas en los próximos meses.
Uno de los aspectos más destacados de estos comicios es que Patricia Gámez, representante de un grupo afín al oficialismo, asumió la presidencia de la Junta Directiva del CANG, mientras que Alicia Franco, vinculada a una facción relacionada con el exrector de la Universidad de San Carlos, Estuardo Gálvez, liderará el Tribunal de Honor. Tradicionalmente, ambas instancias solían estar en manos de una misma agrupación, garantizando así una alineación en los criterios de decisión. Sin embargo, el actual panorama plantea una división de poderes que podría tener repercusiones significativas en la designación de funcionarios clave.
Impacto en la Elección de Altos Cargos
Tanto la Junta Directiva como el Tribunal de Honor del CANG juegan un papel determinante en la selección de figuras relevantes dentro del sistema judicial guatemalteco. La legislación establece que los presidentes de ambas instancias participan en la comisión de postulación encargada de elegir al próximo fiscal general, una decisión que se tomará el próximo año y que ha generado gran expectativa.
Según Marielos Fuentes, directora de Guatemala Visible, la alta participación de los agremiados, que superó los 19 mil votos, fue un factor clave para evitar que una sola planilla obtuviera un triunfo absoluto. Esta distribución de votos permitiría un mayor equilibrio en la toma de decisiones dentro del CANG, promoviendo la colaboración entre ambas dirigentes.
Fuentes enfatizó que el verdadero impacto de estas elecciones se evidenciará en los próximos meses, especialmente cuando la Junta Directiva y el Tribunal de Honor deban coordinar esfuerzos en temas cruciales, como la selección de candidatos para la Fiscalía General. Además, recordó que en 2026 el CANG tendrá una participación relevante en la nominación de magistrados del Tribunal Supremo Electoral (TSE) y de la Corte de Constitucionalidad (CC), donde deberá designar a representantes titulares y suplentes.
Una Nueva Correlación de Fuerzas
Carmen Aída Ibarra, directora del Movimiento Pro Justicia, destacó que los resultados electorales representan un cambio significativo en la dinámica de poder dentro del gremio de abogados. En su opinión, este nuevo escenario ha desplazado a ciertos grupos tradicionalmente influyentes, algunos de los cuales han sido señalados por su injerencia en procesos de postulación.
Ibarra resaltó que con Gámez en la presidencia del CANG y Franco liderando el Tribunal de Honor, se han configurado dos fuerzas que compartirán el control de la institución, lo que podría generar tensiones y negociaciones en la toma de decisiones clave. En particular, señaló que el grupo de Franco podría tener mayor influencia en la nominación de candidatos a fiscal general, debido a su vinculación con Estuardo Gálvez y su posible alianza con el decano de la Universidad de San Carlos y las universidades regionales. En contraste, el grupo de Gámez podría tener ventaja en la selección de magistrados del TSE y en la designación de magistrados para la CC.
Repercusiones en el Gremio
Francisco Quezada, analista del Centro de Investigaciones Económicas Nacionales (CIEN), también abordó la cuestión, resaltando que la división de fuerzas dentro del CANG podría impactar directamente en los próximos procesos de postulación. Según su análisis, la fragmentación del poder dentro del Colegio podría traducirse en una mayor diversidad en la toma de decisiones, evitando la concentración de votos en un solo sector.
Quezada destacó que el predominio histórico de ciertos grupos dentro del CANG ha influido en los resultados de procesos anteriores. Sin embargo, los recientes comicios han abierto la puerta a una mayor participación y a un escenario más competitivo, lo que podría representar un cambio positivo para el gremio.
Contexto Electoral
Las elecciones del CANG se desarrollaron en dos rondas, los días 7 y 14 de febrero de 2025. De las 11 planillas iniciales, solo dos lograron avanzar a la segunda vuelta, resultando electas Patricia Gámez como presidenta de la Junta Directiva y Alicia Franco como presidenta del Tribunal de Honor para el período 2025-2027.
Gámez, exjueza, lidera un grupo cercano al Gobierno, mientras que Franco ha sido identificada con el sector vinculado a Estuardo Gálvez. Además de estas designaciones, la planilla de Franco también obtuvo el control del Comité Asesor de Inversiones del CANG.
El CANG es una institución de gran relevancia dentro del sistema legal guatemalteco, ya que participa en al menos 12 instancias de selección de funcionarios, incluyendo la designación de magistrados en distintas cortes. Con el nuevo equilibrio de poder, los próximos meses serán clave para definir cómo evolucionará la relación entre las dos dirigentes y cómo impactará en los procesos de elección de autoridades judiciales.